Leonor Ramírez. Muebles Ramycor.
Muebles Ramycor es la radiografía del crecimiento a través del esfuerzo y la constancia. La empresa, fundada por Ramón Ramírez y su hermano en 1975, está ahora a cargo de los hijos de Ramón, que tienen en los inicios de la empresa un espejo donde mirarse cada día.
Leonor define a su progenitor como una persona “con mucha iniciativa y ganas de hacer cosas nuevas” que, después de haber sido presidente de la cooperativa del mueble de Valverde, decidió “montarse por su cuenta partiendo de cero”. En los inicios, “él medía, diseñaba, fabricaba. Lo hacía todo”. Ahora, gracias al trabajo y visión de futuro de la familia Ramírez, los trabajos de la empresa están presentes en muchos países de Europa.
-¿Quiénes están actualmente al frente de Ramycor?
Mi padre estuvo trabajando hasta el año 2004 y, desde entonces, estamos mi hermano y yo. En un principio fue autónomo y en los años 80 crea una sociedad. Desde la jubilación de mi padre, mi hermano y yo llevamos a medias la administración y las ventas, mi hermano también se encarga de la parte comercial y la fábrica y yo estoy en la exposición.
-¿Cuántos empleados tienen?
Depende del trabajo que tengamos pero sobre 13-14 personas. Muchos de nuestros trabajadores llevan con nosotros desde que fundamos la empresa y otros son más eventuales, trabajan en función de los proyectos que tengamos.
-¿Cómo llegan a realizar proyectos tan diferentes como puede ser el mobiliario de una tienda o la recepción de un edificio?
A través de la labor comercial. Cuando empezó la crisis nos planteamos movernos para mantener nuestra actividad y el empleo en la fábrica. De hecho, hemos tenido trabajadores montando trabajos realizados por nosotros en Ámsterdam, en Londres, en París, en Suecia, Manchester, Portugal, Bilbao, Barcelona, Madrid, Málaga… Trabajamos donde nos llamen. Tenemos la firme voluntad de no parar de buscar trabajo.
Ahora (en el momento de la realización de esta entrevista) tenemos tres trabajadores en Bilbao montando cocinas y dos en Ceuta montando muebles fabricados para una tienda.
-¿Qué se valora en esos destinos tan dispares de vuestro trabajo?
Están contentos con nuestro trabajo, con el servicio que ofrecemos, hasta dejar el mueble montado, y nuestra calidad.
-¿Cómo ha afectado la crisis al sector?
La situación que estamos pasando es difícil. Nosotros nos hemos visto obligados, entre comillas, a hacer este tipo de trabajo porque el cliente particular no llega como lo hacía antes. Hace años, con el cliente particular no habría que hacer lo que hacemos hoy en día. Pero detectamos que la gente no viene a las exposiciones, se queda en los muebles más baratos y de menos calidad, lo que nos llevó a buscar otra salida, que es paralela a la de siempre. No hemos dejado de atender al cliente particular y de amueblar casas.
-¿Cómo es el cliente que quiere un mueble a medida de Valverde?
Tiene un poder adquisitivo medio-alto. Un mueble barato se encuentra en otro sitio. Nosotros damos un mueble adaptado a sus necesidades y a su medida, con la máxima calidad.
No existe un estilo de mueble definido, una moda. Cada cliente va personalizando y tiene claro lo que quiere, que es especial. Un mueble bueno y de calidad.
-¿El cliente repite?
Sí. Lo más importante para que, de ese, venga otro, es el boca a boca. De un cliente satisfecho vienen otros. Eso es lo principal.
-Para que un año sea bueno, ¿qué se tiene que dar?
Hemos tenido trabajo, hemos mantenido al personal y satisfacemos las necesidades de todas las familias que tenemos aquí. Que tengamos beneficios, por supuesto, y que el cliente te muestre que está satisfecho. Eso es, al final, lo que da sentido a lo que hacemos.
Polígono Industrial El Monete. Nave 109
Tel. 959 552 501
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Valverde del Camino (Huelva)
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